GREYTOWN, Sudáfrica: Las palabras de los niños de un pueblo aislado en la rural de Sudáfrica han dejado un depredador sexual internacional.
U.S. investigadores dicen que Jesse Osmun confesó que como voluntaria de un cuerpo de paz, que durante meses había molestado sexualmente por lo menos cinco niñas en un albergue de Sudáfrica para los huérfanos del SIDA y otros niños. Ninguna de las chicas fueron más de 6.
En una cuenta de Twitter y blogs, Osmun retratado a sí mismo como un campeón de África y escribió acerca de cómo trabajar con los niños. Antes de llegar a Sudáfrica, donde empezó a trabajar en el refugio en marzo de 2010, Osmun voluntariamente en un orfanato en Kenia, donde el director dijo que no hizo ningún daño. Osmun escribió también de buscar otro trabajo de ayuda internacional antes de su detención la semana pasada.
Su identidad filántropo puede haber ayudado a cubrir un lado oscuro. Entonces el habla de niñas pequeñas.
"Estaban asustados. Eran valientes para decir. Hicieron algo muy importante,"dijo Samkele Mhlongo, un traductor de la policía de Greytown que ayudó a una entrevista de investigador estadounidense dos de las víctimas del centro de SIDA de Umvoti donde se ofrecieron Osmun.
Mhlongo dijo que los niños, que se muestran imágenes de Osmun, dijeron describieron ser instruido por él a realizar sexo oral, y después reciben dulces y advertencias para que no digan a nadie lo que había sucedido. Mhlongo, dijo que Osmun mostró a los niños la pornografía almacenada en su equipo.
De acuerdo con la declaración jurada de un investigador presentado a la Corte de Connecticut que tratará de Osmun, un profesor vio Osmun seguir a tres niñas en un edificio en Umvoti el 24 de mayo. El profesor siguió después de unos minutos y vio Osmun con su espalda a ella, una de las chicas cerca de él. Osmun apareció asustado y hasta sus pantalones en zip. Una chica a más tarde el profesor pide a realizar sexo oral.
Dos días más tarde, de acuerdo con la declaración jurada, Osmun fue confrontado por un gestor de Umvoti. El mismo día, Osmun informó del cuerpo de paz que quería poner fin a varios meses de los habituales dos años su servicio. En este momento, nadie le dijo a cuerpo de paz de las preocupaciones de abuso sexual. Policía de Greytown dijo a The Associated Press que nunca recibieron una denuncia de Umvoti.
El investigador U.S. dijo director de Umvoti le dijo que ella había enfrentado Osmun antes de que fue a pedirle a acortar su servicio del cuerpo de paz. Dijo que ella le había dicho que ella creía que era un pederasta y le instó a obtener ayuda. Osmun dijo que el director buscaría ayuda. El investigador U.S. también dijo que los niños en el centro habían llegado a Umvoti funcionarios con inquietantes historias sobre Osmun meses antes de mayo. Funcionarios de Umvoti se negaron a comentar este artículo.
Osmun voló de Sudáfrica el 1 de junio, y fue sólo el 7 de junio que Umvoti informó el cuerpo de paz de sus preocupaciones, dijeron que los investigadores U.S.. Cuerpo de paz inmediatamente envió a su propio investigador a Greytown, y se informó a la policía sudafricana.
El 4 de agosto, dijeron que los investigadores U.S., enfrentó a Osmun en Connecticut y obtuvieron su confesión escrita.
Joan van Niekerk de Childline Sudáfrica, que hace campaña contra la explotación infantil, dijo que el hombre que los niños describen a los funcionarios el perfil de un pedófilo de cálculo. Pedófilos buscan lugares donde los niños son vulnerables, dijo, que describe mucho a los países en desarrollo como Sudáfrica, donde la aplicación de la ley puede ser débil y el conocimiento de cómo proteger a los niños bajo.
Comúnmente en Sudáfrica, dijo, "casos pueden tardar años en llegar a la Corte, durante qué evidencia se pierde, contaminado... y más el caso toma más probable la absolución".
Marita Rademeyer, un psicólogo sudafricano que asesora a los niños que han sido objeto de abusos, dijo sudafricanos estudios muestran sólo una en nueve informó de casos de maltrato de menores acudir a los tribunales, y cuando hay condenas, condenas rara vez acercan los 30 años Osmun caras en Estados Unidos. Dijo que muchos casos nunca se informan porque las víctimas sentir vergüenza o tienen no se pueden confiar a contar.
De acuerdo con la policía sudafricana, más de 27.000 denunciaron casos de delitos sexuales contra los niños el año pasado, representando casi la mitad de todos los delitos contra los niños. Expertos dicen que la debilidad de la familia sudafricana: un legado del apartheid cuando leyes forzó a adultos a buscar trabajo lejos de casa y altas tasas de delincuencia y violencia que aquí los niños especialmente vulnerables. Además, Sudáfrica, el país con la mayoría de las personas viviendo con VIH en el mundo, tiene millones de huérfanos del SIDA.
Hermana Mary Owens, director de la casa de los niños de Nyumbani, dijo que Osmun voluntario en 2006 en su Nairobi, refugio de Kenya para los niños huérfanos por el SIDA y los niños que son VIH positivas. Owens, informadas a la AP de los cargos contra Osmun, dijo que había hablado con personal y determinó que no había sido sospechoso de actividades similares.
Preguntado si los fiscales U.S. estaban investigando si Osmun había abusado de niños en Kenia, dijo Laura Sweeney, un portavoz del departamento de justicia estadounidense familiarizado con su caso, que ella no podría comentar.
Osmun había escrito en un blog de haber trabajado en el orfanato de keniano, aunque dijo que fue en el 2004.
El cuerpo de paz, un organismo humanitario de 50 años que da oportunidades de los estadounidenses ordinarios para hacer trabajo de desarrollo internacional, dijo cada solicitante se someta a una verificación de antecedentes penales y es "examinada para conveniencia."
Liz Hughes, director de programas de Sudáfrica para la Agencia de ayuda internacional Save the Children, dijo que esa proyección es sólo el primer paso. Organizaciones de ayuda a los niños deben reconocer que las personas que quieren herir a los niños se dibujarán a sus refugios y escuelas y deben capacitar al personal a reconocer las señales de peligro. Los niños también deben sentirse seguros de que cuando denuncian abusos, se tomarán en serio, dijo Hughes.
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